Empezaré siendo claro: Insarn es la oficial científica en jefe de la segunda flota invasora Zangyack. Suya es la tarea de hacer que los Comandantes de Campo (no he hallado mejor traducción para “Action Commander") adopten aspecto gigante. Y la segunda villana Súper Sentai más atractiva que este Dekaranger ha visto jamás (el primer puesto sigue siendo para Sphinx. Mele no es villana. Porque no es mala).
No tantas veces como Barizorg, pero si que baja varias veces a la Tierra y llega a pelear con los héroes (y nada mal, por cierto). Una de esas ocasiones es causada por el hecho de que se queda prendada de… Kyosuke Jinnai, quien fuera Red Racer de Carranger. De hecho, llega a tumbarle y mostrar su afecto de manera más bien agresiva. E hilarante, como no podía ser de otra manera estando de por medio un antiguo Carranger.
También se descubre que en su juventud Insarn tenia… que tenía curvas, vaya. Todo acaba siendo un caos de golpes, risas y un antiguo héroe que la lía de que manera. ¡Y sin hacer nada!
En un aspecto más serio, ella es una de las que advierte a Waltz Gil en contra de pilotar el Gran Waltz por si mismo y enfrentarse a los Gokaiger. Es también la única que intercede por Damaras cuando este es arrestado acusado de haber permitido la muerte de Waltz Gil. Cuando tras ser atacado por la espalda por Basco lo convierte en un gigante, por su tono de voz… Estoy convencido de que no sintió pena por él. Pero si de que no le resultaba cómodo hacerle eso a alguien a quien respeta.
Porque si algo tiene Insarn es que aunque no lo diga, en su actitud se nota a quien respeta, a quien teme (sutil pero muy importante diferencia), a quien considera un superior y a quien un igual. La cogí cariño, y es el único miembro de las fuerzas Zangyack a quien he llegado a respetar. De tener que enfrentarme a ella, la única con quien intentaría arreglar las cosas sin pelear. Pero de hacerlo, golpearía rápido y golpearía fuerte. Sin juegos ni florituras. Porque tendría mi respeto.
Muere en combate contra los héroes cuando en teoría se la da una última oportunidad de redimirse por no haber evitado la muerte del príncipe. Primero se enfrenta a los héroes a los mandos del Gran Insarn, su mecha personal. Cuando es destruido, rechaza la ayuda de un grupo de Guardias Imperiales que acuden a la lucha, muriendo por un disparo del Gokai Galleon Buster.
No era una oportunidad de redimirse. La usaron como distracción para dar tiempo a llegar a una tercera flota invasora aun mayor que la de la Gran Guerra Legendaria. Insarn no se merecía un fin así.
En la siguiente entrega tendréis ocasión de conocer a un personaje que muestra hasta donde puede llegar el villanesco pragmatismo de los Zangyack. Alguien con una historia triste pero que no podía acabar de otra manera.
¡Nos leemos!
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