¡Bienvenidos un día más a la Dekabase! Hoy quería comentar
un tema que la verdad, no recuerdo ver mencionad en ningún sitio. Pero claro mi
memoria es la que es. Al grano.
En principio, lo lógico es pensar que en un enfrentamiento
final entre un Súper Sentai y el villano máximo de turno... Este muere.
Destruido, vaporizado, convertido en una muestra de pirotecnia y humo
multicolor. No más villano. Solo eso mismo: Humo, algún talento reconocido y
puede que a veces algún chiste malo. Pero...
...No siempre es así, estimados visitantes. No siempre el
villano es destruido. A veces huye. A veces es encerrado, aislado o puesto en
una situación en la cual no puede volver a actuar. Al menos en un largo,
larguísimo tiempo. De hecho, hay ocasiones (pocas, cierto) en las cuales el
villano ni siquiera llega a luchar. Simplemente se recluye... en espera de una
mejor ocasión en la cual llevar a cabo sus planes.
¿Casos concretos en un Súper Sentai? No en Tokusou Sentai
Dekaranger, me temo. Sobre todo por un detalle: Los villanos en este Súper
Sentai no son malvados al uso. Son criminales y tratados de acorde a las leyes
que los Dekaranger mantienen. Incluso el Agente Abrera. Que no es ni más ni
menos que un traficante. Importante, si. Pero un criminal al fin y al cabo.
Un ejemplo de villano que de hecho logra huir y refugiarse
es Gaara, sacerdote de Goadom y enemigo de GoGo Sentai Boukenger. Lo que hace
es huir y mientras todo se derrumba a su alrededor, entra de nuevo en la tumba
de la cual salió. Con la esperanza de resurgir algún día de nuevo.
Otros incluso llegan a reformarse y vivir en Japón como un
ciudadano más. Como los líderes de los Bowzock en Carranger. Que acaban
acudiendo a un instituto para tener al fin una educación decente y trabajando a
tiempo parcial en un restaurante.
Derrotar a un villano no siempre quiere decir destruirle.
A veces no queda otro remedio, por supuesto. Pero otras... Bien, los ejemplos
arriba expuestos son buena muestra de ello. Un tema interesante al que quizás
vuelva en un futuro.
¡Nos leemos!
1 comentario:
Lo ideal, y más cuando no son malvados al uso, es reconvertirlos y orientarlos para crear seres productivos, e insertarlos así en la sociedad.
Si eso no resulta posible, pues lucha al canto, con la consabida derrota, claro :)
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